lunes, 15 de abril de 2013

NO PUEDO DEJAR A MI PERRO SOLO EN CASA SIN QUE LA LIE (Ansiedad por Separación)

La ansiedad por separación ocurre cuando un perro siente una angustia desmedida e irracional a ser separado de su dueño. Los destrozos, llantos, ladridos...etc sólo son la manera que tiene el perro de exteriorizar dicha angustia e intentar aliviarla y se da cuando el perro está demasiado apegado a su dueño.
 
 
 
¿Cómo puede ocurrir?
Todos los perros deben acostumbrarse paulatinamente a pasar tiempo solos, pero no se les puede dejar así de un día para otro, por lo que hay que empezar poco a poco y luego aumentar el tiempo de ausencia para que no cause un trauma en el perro.
 
 
 
La intensidad y los síntomas de la ansiedad por separación varían según el perro: algunos perros toleran las salidas regulares de sus dueños por trabajo pero no soportan quedarse solos por las noches, otros se angustian sobre todo los lunes o los días después de las vacaciones que son periodos en los que han tenido un contacto más continuado con su dueño, algunos destrozan todo lo que pillan a su paso, otros aúllan, muestran defecaciones o micciones inapropiadas y en los casos más extremos se pueden presentar vómitos, autolesiones y temblores.
 
 
¿Qué podemos hacer?
Lo primero que debemos saber es lo que no funciona:
-         Cerrar al perro en una habitación o en una jaula no solucionará nada ya que lo que le da miedo a nuestro perro no es el quedarse solo sino estar alejado de su dueño.
-         El castigo por los destrozos tampoco funciona ya que el perro no se porta así por propia elección sino porque tiene terror a quedarse sin su dueño y de esta manera el castigo solo servirá para incrementar su ansiedad agravando el problema.
 
 
Lo que debemos enseñarle es que puede sobrevivir sin la presencia del dueño lo cual se logra MODIFICANDO LA CONDUCTA:
 
-        Aumentando el juego y la actividad física de tu perro.
-        Entreteniendo a tu perro en tu ausencia mediante el uso de juguetes interactivos.
-        Evitar las rutinas antes de nuestra salida: bajar persianas, apagar luces, coger las llaves...todos estos actos ya están anunciando a nuestro perro que nos vamos, disparando su ansiedad antes de que hayamos salido por la puerta. Para rebajar este trauma debemos tratar de hacer todos estos actos 30 minutos antes de nuestra salida.
 
Consulta con tu veterinario para saber qué tipo de modificaciones debes llevar a cabo en cada caso y así reducir el nivel de miedo y ansiedad de tu mascota para que pueda hacer frente a situaciones difíciles para él, como es tu ausencia.


 
 
V20A



sábado, 23 de marzo de 2013

TORSION DE ESTOMAGO


Seguramente todos hemos oído hablar de la torsión de estómago debido, desgraciadamente, a algún perro que ha muerto por ello, pero… sabemos que es exactamente, como podemos reducir la probabilidad de que ocurra o que debemos hacer si nuestro perro lo sufre? Aunque conozcas la respuesta a todas estas preguntas te recomendamos que leas atentamente este artículo, seguro que descubres algo nuevo y el mayor beneficiado de ello será tu perro.

 
 
¿Qué es la Torsión de Estómago?
La Torsión de Estómago es una distensión aguda del estómago en la que éste puede llegar a torcerse sobre sí mismo. El estómago del perro está sujeto por dos ligamentos que, dependiendo de su talla y del volumen de la cavidad abdominal, pueden no ser suficientemente fuertes como para sostenerlo. El estómago puede bascular más de la cuenta por diferentes motivos: por el movimiento, los saltos, los cambios de postura...




El principal problema es que, si estos ligamentos no son lo suficientemente resistentes como para asumir esa basculación y controlarla, el estómago puede que acabe torciéndose sobre sí mismo.

Cuando esto ocurre el perro no puede descargar el contenido del estómago debido a que éste se encuentra retorcido en ambos extremos. Así pues, la presión aumenta hasta el punto de provocar cambios en otros órganos que ponen en riesgo la vida del animal, ya que cuando el estómago gira sobre sí mismo, se interrumpe la circulación sanguínea en ambos sentidos (de entrada y retorno al estómago).




Podríamos detallar una lista de perros más predisponentes a sufrir este problema… pero no lo haremos, ya que todos los perros, incluso los de pequeño tamaño, tienen el riesgo de sufrir la torsión.

  

¿Cómo se detecta?
La torsión de estómago se detecta fácilmente, siendo los siguientes síntomas los más representativos:

 
-       El perro se muestra inquieto, no para de moverse y se queja.

-       Eructa y sufre espasmos abdominales.

-       Intenta vomitar pero no lo consigue, tan solo arroja saliva espumosa en abundancia.

-       Su abdomen se hincha y se pone tenso, duro, y si lo tocamos suena como un tambor.

 
Si nuestro perro refleja estos síntomas, solo hay una cosa que se podamos hacer: acudir inmediatamente a un veterinario (guarda en tu móvil el teléfono de urgencia de tu veterinario de confianza ya que en casos como este cada segundo es vital).

 
Prevención

Para evitar la torsión podemos hacer varias cosas:

-       Elevar los comederos hasta la altura del pecho de nuestra mascota (muy importante). Con ello evitaremos que el animal trague excesivas cantidades de aire durante su alimentación, con lo que disminuimos la cantidad de gases dentro del estomago.

-       Evitar grandes volúmenes de comida (hay comederos especiales para perros ansiosos con la comida, consulta a tu veterinario).
 
 
 
 

-       El ejercicio físico violento (jugar, correr) tras una comida abundante supone un esfuerzo respiratorio que favorece la torsión.

-       Alimentar dos veces por día (si son cachorros, tres veces al día); si no come una de las raciones NO duplicar la siguiente.

-       No se debe alimentar al perro si parece estresado o excitado.

-       Evitar que tomen agua en exceso después de comer.

-       Si van a viajar, dar largos paseos... es mejor que ayunen y coman al final de viaje o del paseo.

-       No alimentar al animal a última hora de la noche.
 
 
 
 
V20A

jueves, 14 de marzo de 2013

PARVOVIROSIS CANINA, UNA GRAVE ENFERMEDAD

La parvovirosis canina es una enfermedad provocada por un virus. La lucha contra los virus y las enfermedades que estos desencadenan es complicada ya que no responden frente a los antibióticos y únicamente las defensas de los animales son capaces de acabar con ellos.
 
Para ayudar a las defensas de los animales existen las vacunas que enseñan al organismo a luchar contra este tipo de virus, de ahí la importancia de seguir un correcto plan de vacunación en nuestros cachorros.
 
 
 
 
Normalmente los casos más graves de esta enfermedad se dan en cachorros menores de 6 meses que han entrado en contacto con el virus sin haber comenzado su plan de vacunación o bien sin haberle completado correctamente. Además a esto hay que sumarle que son animales más débiles porque su sistema inmunitario no está completamente desarrollado.
 

¿Cómo se trasmite?
El virus se trasmite por vía oral y una vez que accede al interior del organismo se dirige hacia las células de la mucosa gastrointestinal donde desencadena su máximo potencial virulento provocando un grave cuadro de gastroenteritis aguda. En algún cachorro puede afectar a su sistema linfático y cardiaco.

 

Existen unas razas de perros más predisponentes como son: Rottweiler, Doberman, Pinscher, Springer Spaniel Inglés y Labrador Retriever de pelo negro.


 
¿Cómo se detecta?
Normalmente el cachorro que presenta parvovirosis tiene síntomas tales como con apatía, pérdida de apetito, naúseas, vómitos, diarrea y finalmente desemboca en una diarrea muy liquida y con sangre.
 
 
¿Cómo tratar al perro enfermo?

Una vez confirmado el diagnóstico de Parvovirosis, normalmente mediante la realización de un test ELISA a través de la sangre del animal, todos los objetivos del tratamiento se dirigen a paliar los síntomas de la gastroenteritis aguda.
La mejor arma para combatir esta enfermedad es la PREVENCIÓN de la misma, mediante la realización de un correcto protocolo de vacunación en la mascota desde que se adquiere cuando es cachorro, así como seguir las indicaciones veterinarias durante toda su vida.
 
 
 
 
 
V20A

viernes, 8 de marzo de 2013

LA ORUGA PROCESIONARIA


¿Qué es la oruga procesionaria?

La procesionaria del pino, Thaumetopoea pityocampa Schif (Ufffff… vaya nombre), es un lepidóptero o mariposa de la familia Thaumetopoeidae conocida por sus orugas urticantes, que al principio de la primavera abandonan sus característicos bolsones,  formando una procesión una detrás de otras, para enterrarse en la tierra, pupar y completar su metamorfosis, de ahí su nombre de procesionaria.

 

 
El peligro de la procesionaria radica en los cerca 500.000 tricomas, una especie de dardos o flechas envenenadas que recubren su cuerpo y liberan cuando se sienten molestadas o amenazadas.


 

Síntomas
El contagio sobre el perro puede ser directo al llamar su atención la hilera en movimiento y chupar o tocar dicha hilera,  o bien puede ser a través de un nido que se haya caído, ya que en el exterior existen pelos urticantes de las mismas orugas que lo habitaban.
 
Los síntomas más característicos son una inflamación de los labios de la cavidad bucal y cabeza en general. El animal empieza con una gran excitación, dolor e intenta rascarse, además de babear exageradamente.

 

Si el contagio ha sido con la lengua, en la zona que ha estado en contacto con las orugas, se produce una inflamación, hipersalivación y posterior necrosis. La excesiva inflamación de este órgano puede causar la asfixia del perro.


Tratamiento 

En caso de que nuestro perro toque una oruga es muy importante proceder con serenidad y rapidez. La actuación es simple: lavar la zona afectada con agua templada y acudir inmediatamente al veterinario.
Prevención
-       Evitar pasear con nuestro perro por zonas con pinos y cedros durante el periodo de riesgo (comienzos de la primavera).
-       Durante este mismo periodo, estar muy atentos a lo que nuestro perro se pueda meter a la boca durante el paseo (siempre deberíamos de hacerlo).
 
Consejo
Acuda a su veterinario habitual ante la aparición de cualquier síntoma o comportamiento parecido al descrito.

 
V20A

viernes, 15 de febrero de 2013

EL ASMA FELINO


El asma felino o la bronquitis alérgica felina es una enfermedad respiratoria crónica relativamente frecuente entre la población actual de gatos.

El asma, tanto en los humanos como en los gatos, es una enfermedad crónica que rara vez se cura. La presentación clínica del asma felina puede variar con el tiempo en un mismo individuo, y presentarse de forma totalmente diferente en distintos pacientes, es decir que los signos clínicos de esta patología pueden ser constantes o intermitentes, moderados o graves.
 
 

El asma felino puede afectar a gatos  de todas las edades y razas, aunque algunos especialistas concluyen que la raza más afectada son los siameses y padecen la forma más grave de la enfermedad.

Los signos clínicos que presentan son de las vías respiratorias bajas, las cuales se inflaman y hacen que se produzca una dificultad en la respiración, que se manifiesta mediante una respiración del animal con la boca abierta, se acompaña de tos que puede ser esporádica o crónica y ruidos respiratorios llamados sibilancias. Estos gatos son menos activos y según la gravedad del caso pueden presentar cianosis (mucosas de color azulado).

Es importante que los gatos asmáticos sean vigilados cada cierto tiempo por el veterinario y ya que mediante radiografias se puede vigilar el estado del pulmón del paciente y las lesiones que padece de tal manera que se pueda controlar la evolución de la enfermedad.
 

Existen varias medidas preventivas como son:

  • En gatos asmáticos obesos, se puede reducir el peso del animal mediante dietas específicas.
  • Para no empeorar su respiración es recomendable no estresar al gato e impedir que se excite.
  • Es importante mantener un lugar adecuado para el animal con humedad y temperatura adecuadas.
  • Extremar las precauciones para evitar que cojan catarros, como secarles bien si alguna vez tienen el pelo mojado, por ejemplo después de un baño.
 
 
 
V20A




martes, 22 de enero de 2013

Babesiosis (enfermedad de la Garrapata)



Por desgracia, la babesiosis canina es uno de los principales motivos de consulta en las fechas en las que estamos.

 

 
Babesia spp es un parasito que se trasmite por la picadura de garrapatas. El parásito es inoculado en el perro con la saliva de la garrapata e infectan directamente los glóbulos rojos del animal y el periodo de incubación de la enfermedad desde la picadura de la garrapata oscila entre 4 y 21 días.

 


 
El periodo común de presentación de la enfermedad guarda relación con la presencia de garrapatas y como éstas se están adaptando a las condiciones climáticas, por lo que aparecen casos clínicos en cualquier momento del año siendo más frecuentes desde primavera hasta otoño, pero debemos de tener bien claro que la garrapata es una amenaza durante todo el año.


La sintomatología es muy amplia, pudiendo incluir deshidratación, apatía, anorexia, fiebre, palidez de mucosas, orina con sangre...y cuando el animal está muy parasitado se puede dar la muerte del mismo.



PREVENCION

La forma más sencilla de acabar con esta enfermedad es la prevención: evitando la presencia de garrapatas sobre nuestros perros; para ello existen collares antiparasitarios (protegen durante 3 ó 4 meses) o bien pipetas (protección  por 28 días) con una eficacia muy alta en la prevención de la enfermedad.


Existe una vacuna que se aplica en cánidos y que ofrece una protección muy pobre frente a estos parásitos que junto con su elevado precio hace que nosotros no la recomendemos.
 


IMPORTANTE

Este tema, por desgracia, ha adquirido una gran relevancia en estos días por lo que os recalcamos de nuevo lo más importante que debéis tener en cuenta:
 

-       La garrapata se da todo el año (olvida la creencia popular que asocia la garrapata a periodos de calor, porque es totalmente falso).
 

-       Para reducir el riesgo de transmisión de la babesiosis, debemos de llevar siempre protegida a nuestra mascota, para lo que los métodos más efectivos son el collar antiparasitario y la pipeta (pide información sobre su colocación y duración a tu veterinario habitual).

 
-       Ante síntomas como perdida de la actividad habitual (apatía), orina excesivamente oscura, pérdida de apetito, etc… acude rápidamente a tu veterinario.
 
 
 
 
V20A

 

 

lunes, 14 de enero de 2013

Everlasting Fun Ball (La Bola Verde!)


 
Bajo este nombre tan largo se esconde uno de los juguetes más interesantes y con más soluciones, que harán pasar grandes momentos de diversión a nuestra mascota.
 
Como se puede observar es una pelota de un material muy resistente y elástico, que cuenta con dos aberturas en los lados opuestos por donde saldrán las recompensas del juego. El objetivo del juguete es que el perro aprenda a superar el estimulo negativo que supone tener la comida cerca y no poder acceder a ella, para lo que tendrá que pensar en soluciones al problema que le permitan obtener su premio.
Cada perro busca una posible solución al problema y la aplica, así que nos podremos encontrar múltiples soluciones que adopta el perro dado el amplio abanico de posibilidades que ofrece este juguete:
-       Morder la pelota de tal manera que se abren los dientes que impiden que la comida salga por los agujeros, dejando que esta caiga libremente.
-       Tirando contra el suelo la pelota.
-       Haciéndola rodar.
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V20A